Percibe como se siente confiar

Percibe como se siente confiar

La energía de la confianza la percibimos en nosotros cuando empezamos a darnos cuenta que tomamos decisiones con certeza, elegimos con seguridad la mejor forma de actuar a cada momento y sabemos fluir con la energía adecuada en cualquier situación. Nuestras palabras, pensamientos y acciones son más bondadosas, empáticas y positivas. Eliminamos el juicio y la crítica tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás, simplemente entendemos la energía presente en un momento dado y sabemos cuál es la mejor forma de actuar.

 

Cuando confiamos en nosotros y somos confiables, vemos cómo las personas a nuestro alrededor empiezan a ser más confiables y permitimos que cumplan con sus acuerdos y compromisos hacia nosotros, pues estamos seguros de lo que creamos ya que que nos expresamos de la mejor manera y permitimos la energía más adecuada para un resultado exitoso. Dejamos de dudar de los demás al elegir bien en quién, cómo y cuándo confiar.

 

Ese sentimiento de confianza va mucho más allá de sentir certeza y seguridad a cada momento, es decir, la preocupación, la angustia, el estrés o el miedo que pudiera presentarse en situaciones complicadas o difíciles, deja de estar ahí. Estamos tranquilos y en paz con todo lo que sucede, con nuestro entorno y con nuestras interacciones. Sentiremos que somos más pacientes, que percibimos mucho mejor las diferentes formas de ser y de actuar de los demás, sabemos cuando permitir y cuando intervenir y de qué manera hacerlo, reconocemos que no hay equivocaciones y que todo pasa por una razón y motivación más elevada. 

 

No hay nada que no podamos crear ni lograr y siempre sabremos cómo continuar y seguir adelante.

 

 

Observa cómo te sientes cuando te permites confiar  

 

Date un momento cada vez que decidas confiar en ti, en alguien o en cualquier situación. Percibe cuales son tus sentimientos cuando expresas tu confianza ya sea en pensamiento, en palabra o en acción.

 

Si sientes tranquilidad, certeza y entendimiento, es probable que ya estés confiando de verdad. Continua manteniendo estos sentimientos al explorar como se siente confiar en las diferentes áreas de tu vida y fortalece las bases de la confianza en cada área al establecer criterios de honestidad, servicio, gratitud, valoración y compromiso con las diferentes relaciones e interacciones en tu vida. Esto te ayudará a mantener tu confianza y personas confiables en tu entorno.

 

Si por el contrario, cuando decides confiar, hay miedo, duda, angustia o preocupación, entonces observa cómo se expresan y actúan las personas en las áreas donde sientes inseguridad. Puede ser o que valides tus sentimientos de duda o no. 

 

Si los validas, esto confirma tu intuición y te permitirá empezar a reconocer cuando es tu intuición percibiendo una verdad. En este caso establece reglas y límites sanos con estas personas o situaciones. Haz una lista de cómo puede mejorarse esa confianza incluyendo acciones que tú puedes tener para apoyar a esas personas y lineamientos que puedes establecer con ellos para crear una interacción de verdadera confianza. 

 

Si dudaste de la situación y resultó que podrías haber confiado, quiere decir que tienes que ver qué te impidió confiar y resolver esas emociones. Es probable que tu desconfianza venga de un prejuicio o de situaciones no resueltas de tus experiencias pasadas. Haz el esfuerzo de conectar de verdad con estas personas o situaciones, escuchar de verdad y entender de donde vienen para así darte cuenta de sus verdaderas intenciones, recordando que todos somos parte de la Creación. 

 

Existe una diferencia entre intuición, confianza y discernimiento; es importante saber a qué te conectas. Recuerda la confianza se va ganando.

 

  •  Poner reglas y límites sanos en todas las áreas de nuestra vida nos da la oportunidad de tener bases sólidas para la cooperación y la interacción con los demás. Son parámetros que nos ayudan a desarrollar nuestro discernimiento.
  • Ser claros y honestos con lo que deseamos. Cumplir con la parte que nos corresponde en cualquier situación.
  • Desarrollar nuestra propia manera de conocer a los demás. Entender que hay diferentes formas de pensar, de actuar y de lograr un resultado; abrir nuestro corazón a ver la belleza y la importancia de la diversidad.
  • Conocerme a mí mismo me permite reconocer mis aprendizajes y confiar en que puedo seguir evolucionando y logrando más a lo largo de mi vida, por ende desarrollo mi confianza en mí. 

Algunos ejemplos de los cambios que podemos percibir...

 

Cuando confiamos en que el resultado deseado se logra, somos pacientes y dejamos que las cosas fluyan en perfecta armonía, sabemos que todo se acomoda y todo suma. Incluso cuando percibimos que algo pudiera salir mejor o hacerse de una mejor manera, logramos enviar la energía adecuada para influenciar el resultado sin tener que intervenir o controlar todo lo que sucede.

 

Es como cuando queremos llegar a un cierto lugar en un momento determinado y tomamos el transporte público y de repente hay tráfico fuera de lo normal o alguna modificación en el servicio. Si en ese momento confiamos en la capacidad de los agentes de transporte, en la cooperación de las demás personas y en la ayuda divina de fluir en el tiempo y el espacio para llegar a tiempo, puede ser que lo logremos. Incluso si el resultado es diferente a lo esperado, entendemos que todo sucede de la mejor manera, confío que este retraso es lo mejor y observo para reconocer el por qué o el aprendizaje. Además, confío que siempre podemos liberar cualquier bloqueo o energía personal que nos impide lograr los resultados deseados. 

Escribir comentario

Comentarios: 0