El orgullo que sentimos al ser alentados es un sentimiento muy poderoso
Cuando alentamos a las personas a nuestro alrededor siempre recibiremos el apoyo que necesitamos.
Vivir en un entorno y ambiente de aliento nos brinda un sentimiento verdadero de hogar, de pertenencia, donde siempre tenemos personas que están de nuestro lado; un entorno propicio para el verdadero compañerismo, amistades reales y conexiones duraderas. Además nos brinda la fortaleza y voluntad necesarias para ir por nuestros sueños. Todo lo que hacemos se vuelve importante porque sabemos que lo hicimos nosotros mismos; que todas y cada una de nuestras acciones son parte de nuestra unicidad y por lo tanto valiosas. Siempre sentiremos orgullo de todo lo que somos y todo lo que vivimos. Este orgullo hace nuestra vida plena, satisfactoria y abundante.
Cuando crecemos y nos desarrollamos con falta de aliento y/o impulso a nuestro alrededor, somos propicios a ser demasiado críticos tanto de nosotros mismos como de los demás. Dentro de nuestro vocabulario cotidiano tendemos a expresarnos con frases “normales” que si las analizamos, podemos ver que son negativas y hasta hirientes o denigrantes. Algo que puede ser rutinario o sin intención negativa, como un comentario de una situación puede convertirse en un martirio eterno o afianzar las limitaciones que una persona cree que ya tiene justo por esa falta de aliento en su vida. Las persona que no han experimentado el sentirse alentados en su vida, por lo general están en conflicto con ellos mismos.
Cuando no tenemos a nadie que nos aliente, caemos en comportamientos destructivos no sólo de juicio y crítica sino también de sabotaje, venganza y envidia. Cuando actuamos de esta manera, nos cerramos a la abundancia del universo ya que vivimos en constante competencia, mediocridad y/o conformismo. Estos sentimientos de venganza, sabotaje y/o envidia, vienen del dolor, de la falta de aliento y de la falta de sentirnos capaces e importantes. Cuando obtenemos o logramos cualquier cosa de esta manera, no lo hacemos a través de nuestra esencia, sino a través de nuestras limitaciones.
A falta de aliento o motivación podemos utilizar esa competencia como impulso y tendemos a ver lo que está mal para mejorarlo o incluso creemos que la “crítica constructiva” es la forma de alentar a los que nos rodean. Puede ser que este reto nos inspire a lograr nuestros objetivos, pero siempre se sentirá una lucha y una insatisfacción de nosotros mismos y de los demás, ya que tenderán a ver todo lo que está mal, en lugar de lo que está bien y el esfuerzo de nuestro trabajo.
La posibilidad de tener todo lo que deseamos y todo por lo que nos esforzamos existe cuando conectamos con nuestro corazón, nuestra esencia verdadera y nuestros deseos más profundos; cuando entendemos nuestra unicidad, que somos parte del todo, inigualables y amamos todo lo que somos. Entonces sabremos reconocer que lo importante es ser nosotros mismos y disfrutar nuestra vida como queramos. Para lograrlo es importante sentir que hay personas en nuestra vida que nos apoyan. Una crítica puede tener el gran poder de derrumbarnos, sobretodo si viene de alguien en quien confío, amo o admiro. Una palabra de aliento puede darnos tanta fortaleza que todo es posible; estimula nuestra autoestima y nos da la confianza necesaria para estar orgullosos de todo lo que somos y así amarnos de verdad.
Siéntete orgulloso de todo lo que eres
Haz una lista de todas y cada una de tus cualidades y otra de tus defectos. ¿Cuál fue más sencilla?, ¿cuál tiene más elementos?
Ahora en tu lista de defectos encuentra lo positivo de cada defecto.
En tu lista de defectos puedes poner también situaciones o características que pudieran causarte vergüenza, inseguridad o miedo a ser criticado o juzgado. A veces los demás van a burlarse o criticar lo que es diferente a ellos, lo que envidian o lo que les parece una amenaza. Encuentra lo positivo de esto y verás que no es un defecto, es una cualidad más, es algo que te conforma con un individuo único y que tiene una razón positiva de ser así.
Todo lo que tu eres te permite brillar tu verdadera esencia de amor y te permite cumplir tu misión o propósito divino; disfrutar de la vida y vivir en alegría y plenitud.
Conecta con tu corazón y analiza cada cosa de tu lista. ¡Eres un ser maravilloso! ¡Eres una chispa, parte de la divinidad! Si puedes ver lo divino en tí, nada será imposible.
- Cada que vayas a expresar una crítica, un juicio o un comentario negativo, aún cuando sea un “hecho”, detente y busca algo alentador que probablemente sea un hecho también que puedes compartir o hacer relucir. La mayoría de las personas están conscientes de sus limitaciones, fallas, defectos y/o fracasos, pero no siempre de sus cualidades, aciertos, posibilidades y/o triunfos. Por más pequeño o insignificante que parezcan algunos triunfos de otros, si logras verlos y hacérselos saber con aliento, podemos ayudarlos a sentirse orgullosos y encontrar la energía para continuar avanzando y haciendo su mejor esfuerzo. Hazlo también contigo mismo.
- Si sientes que la única forma de lograr algo es cuando los demás no lo tienen, al hacer lo “que todos hacen” (aunque sabes que no está bien) o al imponer tu voluntad pase lo que pase, analiza si de verdad logras tu objetivo o si ese objetivo realmente lo mantienes sin dificultad. Es probable que tus verdaderos objetivos no los estés logrando o que aunque logras algo, es cada vez más complicado y difícil mantenerlo; siempre sientes que lo perderás, porque obtener algo de esta manera no viene de tu esencia de la creación, viene de una limitación.
- Es diferente un hecho a un juicio de valor. La perspectiva de cada persona es diferente, si solo expresas tus opiniones desde tu punto de vista, puedes no ver lo que está detrás y puedes malinterpretar lo sucedido y lastimar a alguien en el proceso. Encuentra la manera de expresar los hechos de lo que sucede a tu alrededor sin juicio al considerar a los demás y al utilizar una energía de aliento en vez de desaprobación o crítica.
Recuerda que...
Mantener una actitud alentadora te permitirá ver tus avances y logros y enfocarte en disfrutar conforme sigues avanzando. Hazlo contigo como con los demás.
Una competencia positiva es donde todos aprenden, donde ganar es reconocido, pero no lo más importante. Deja de compararte con los demás, cada persona es diferente y ha vivido diversas circunstancias distintas a los demás, cada perspectiva es única y se perciben las cosas y las emociones de diversas maneras. Si todos nos alentamos, motivamos y reconocemos el esfuerzo personal con respeto, será posible dar lo mejor de sí y obtener los mejores resultados que beneficien a todos en el proceso.
Escribir comentario